29 de marzo de 2005

Algo en el aire flota


Foto Andrés Fernando Lozano Lamo

Algo en el aire flota,
Tal vez sean las heridas
Que le hemos causado a los otros,
Esas heridas que se fueron
Abriendo con nuestras ofensas,
Que fueron sangrando
Con nuestro desprecio
Y que fueron creciendo
Con nuestra ignorancia.

Algo en el aire flota,
Tal vez sean nuestras culpas
Por haber ensordecido
Ante el llamado de una naturaleza
Que trató de ayudarnos.

Algo en aire flota,
Tal vez sea el tiempo
Que aún le queda
A esta humanidad.

Para una parte de nosotros


Foto Andrés Fernando Lozano Lamo

Para el intelecto
Una pequeña trampa
Para obtener una gran confusión.

Para los ojos
Una imagen bonita o fea
Para ganar el derecho a juzgar.

Para la boca
Un poco de ego
Para empezar a hablar.

Para la mente
Solo un segundo de vida
Para obtener una gran confusión,
Para ganar el derecho a juzgar
Y para empezar a hablar.

Creo


Foto Andrés Fernando Lozano Lamo

Creo en ti mujer,
Creo en tus besos,
Creo en tus caricias,
Creo en la inocencia
De tus lágrimas,
Creo en la verdad
De tu sonrisa,
Creo en tus pensamientos
Y ahora creo
Que mi único deseo
no eres tu.

Los hombres no mueren, se matan




Los hombres no mueren, se matan,
Van por el mundo adorando falsos dioses
Que justifiquen su errada forma de vivir,
Que les permita seguir con esa
Aterradora competencia en donde
El vencedor es el que logra
Demostrar que es más,
Que sabe más,
Que tiene el poder para
Doblegar a su oponente.

Los hombres no mueren, se matan,
Van por el mundo con sus pieles,
Con sus miles de rostros
Y con una gran marquilla
Sobre cada prenda
Que tienen puesta,
Todo para sentirse superiores,
Para diferenciar un yo
De él.

Los hombres no mueren, se matan,
Van por el mundo inventando noticias,
Creando guerras para ganar protagonismo,
Haciendo de la política y hasta del diario vivir
Un verdadero espectáculo.

Los hombres no mueren, se matan,
Van por el mundo creando eslóganes,
Frases y lemas para convencer
A los otros que no es malo ser así
Y de paso para tratar de convencerse
A si mismo de que lo que dicen
Y lo que inventan es verdad.

Los hombres no mueren, se matan,
Van por el mundo sin darse cuenta
De que son parte de él.

Señoras y señores, niños y niñas...


(foto de Sebastian Salgado)

Señores y señoras,
Niños y niñas,
No pregunten
En dónde está la comida,
En dónde está el techo,
La vivienda, el trabajo y
Las oportunidades
Porque nadie les va a responder.

Señoras y señores,
Niños y niñas,
No pregunten
De quiénes son esas armas,
Ni quiénes las disparan,
Ni por qué las disparan,
Mucho menos a quiénes les disparan,
Porque nadie les va a responder.

Señoras y señores,
Niños y niñas,
No pregunten
Qué hicieron para merecer esto,
Ni cuándo volverá todo a la normalidad,
Y mucho menos
Qué es lo normal
¿Vivir con hambre?
¿Dormir sin cama?
¿Un techo con goteras?
¿Unas paredes de cartón?
Porque nadie les va a responder.

Señoras y señores,
Niños y niñas,
Aunque todo parezca perdido,
Aunque las posibilidades de cambiar esto
Solo sean una en un millón,
Aunque nadie tenga respuestas
A sus preguntas y
Aunque los días pasen
Y todo parezca perdido…

No se rindan,
No nos rindamos,
Según dicen,
Los buenos somos más.